Desde 1863, a orillas de la laguna Sánchez (donde hoy está la plaza Sarmiento) funcionó una capilla en terrenos donados por Ramón Sánchez a los padres franciscanos. En 1866 pasó al Obispado y, en 1888, se transformó en parroquia.

El actual edificio se inició en 1897, con un proyecto del constructor U. Lazzari que luego fue continuado por el ingeniero italiano A. Micheletti y fue declarado de interés patrimonial de la ciudad. Inaugurado en 1909, recién en 1924 se terminó la decoración de su interior, ejecutada por el artista Dante Veratti. Su historia es sumamente particular porque la laguna y los terrenos que la circundaban eran propiedad de Ramón Sánches cuya generosidad dio origen a esta iglesia. Para ello donó una parcela de 25 metros de frente por 54 m de fondo para que se edificara la capilla en honor a la santa de América “Santa Rosa de Lima”. Se formó una comisión de vecinos y se pidió el correspondiente permiso a las autoridades eclesiásticas. En 1850 los vecinos pidieron la autorización para la construcción de la capilla y una escuela para niños. Solicitados nuevos frailes para la creciente atención de fieles llegaron en 1893 25 frailes desde Italia, provenientes de la orden de los franciscanos. El 29 de junio se coloca y bendice la piedra fundamental para el altar mayor. Escriturada la propiedad del lote a favor de la orden franciscana de San Lorenzo el emprendimiento avanzó con lentitud por falta de fondos suficientes. Por lo tanto los frailes se trasladaban del convento de San Lorenzo a realizar los servicios. La orden compró al sr. Sánchez un terreno lindero para construcción de un hospicio y hospedaje para los frailes. El 1888 la Capilla fue convertida en iglesia parroquial y se designa su primer cura y vicario. La construcción de templo continuó en 1897 y el 30 de agosto de 1909 se bendijo el nuevo templo parroquial.

Es un templo de tres naves pero al tener todas la misma altura, la aparente forma de bóvedas es sólo una ilusión creada por cielorrasos suspendidos y figuras simples originales y aplicación de la sección áurea, asegurando de este modo una armonía general de conjunto y donde ciertos elementos básicos como la torre tomaban el liderazgo de representación del conjunto. El nuevo templo presentaba una planta de tres naves y por tener todas una misma altura, se aprecia como un espacio único. Modalidad que la ubica dentro de la categoría de las iglesias tipo salón. La aparente forma de bóvedas, en realidad, es una ilusión formada por cielorrasos suspendidos que se desarrollan bajo una cubierta unitaria exterior de dos aguas, con cabriadas de chapa metálicas. El planteo fue ajustado a formas y medidas siguiendo los criterios de composición de fines del siglo XIX.

Los altares

Los altares existentes en la Iglesia Parroquial de Santa Rosa de Lima excepto el altar mayor son en su casi totalidad donaciones de las Cofradías y Archicofradías que integraban el número de asociaciones existentes en la Parroquia. Ellos han sido donados en distintas épocas, desde la inauguración del nuevo Templo, en 1909. Los únicos altares que no han sido costeados por congregaciones son: el altar del sagrado Corazón de Jesús, donado por Dr. Carlos M. Avila, y el altar del Calvario, donación de la Sra. Serafina G. de Gonzáles,  madre del ex vicepresidente de la República Don Elpidio Gonzáles.

En el altar del Sagrado Corazón de Jesús, donado por el sr. Avilla está el Sagrario, donde Jesús Eucaristía, centro de la vida cristiano recibe el amoroso homenaje de los fieles y dispensa a las almas que a El acuden, todas las Misericordias que desbordan de su Divino y Amante Corazón.

Los altares de madera del Sagrado Corazón y de la Virgen fueron realizados según los datos de la placa por “Christian Mahlknecht, escultor y constructor de altares. ST. Ulrich- Groden Tirol”. El arq. Juan Pablo Soler nos cuenta que José Luis y Augusto Mahlknecht tienen actualmente una marmolería y carpintería importante que se dedicó por tres generaciones al arte religioso. Su familia, originaria de un pueblo del Tirol, se instaló en Buenos Aires a principios de los años 30. La Descripción del altar, dice: “IX. Altar romano. De madera de roble, con estatua, 1,80m de alto y 3 relieves, 5,8m de alto, 2,20m de ancho. Ornamentación ricamente dorada en la más fina ejecución: precio 3000S. Franco Buenos aires. Librado al Rdo. Sr. Natalio Bértolo, Cura rector de la Parroquia Santa Rosa de Lima en el Rosario de Santa Fe, Arg. América del sur”.

Organo

El Pbro. Natalio Bertolo, que había sido después de su ordenación, en 1898 organista de la Catedral, anhelaba poder adquirir para la Iglesia Santa Rosa de Lima, el instrumento característico de la música sacra. Con tal fin compra en la suma de $ 8.000 el órgano que actualmente posee el Templo Parroquial inaugurado en una solemne función, el 4 de diciembre de 1910. Construido con materiales por la casa Laukhuff de Weikersheim, Alemania. Son ellos quienes proveen los elementos para su restauración y mantenimiento. La consola y los mecanismos, así como algunos de los registros fueron hechos íntegramente en dicha fábrica.

El instrumento consta de dos manuales y uno de pedal de 58 y 27 notas respectivamente; sobre diez, siete y dos registros. Son 19 juegos reales que forman un total de 1212 tubos. De ellos 1122 son de estaño y 90 de madera.
El sistema de transmisión es completamente mecánico, con secretas de válvula tonal principal y válvulas de registro.

En la década de 1980 el órgano se encontraba inutilizable.
La restauración efectuada comprendió la reconstrucción de ambos fuelles, la sustitución de toda la mecánica original desgastada por otra mecánica de precisión. El trabajo fue efectuado por el señor Alejandro Badi, constructor y perito organero diplomado en Austria, quien hizo posible su tarea mediante la colaboración del señor Silvio Iturralde.

 Altar Mayor

 El altar Mayor fue adquirido con la colecta de la feligresía en homenaje de las bodas de plata sacerdotales del Cura Párroco Pbro. Natalio Bértolo en 1923 e inaugurado en 1925.
Realizado por Ovidio Spina, fue modificado en 1994, por el estudio Pasquale Fabro, según la nueva liturgia introducida por el Consilium de 1964, donde se retiro el banco y se construyeron asientos junto al altar, sobre un escalón de mármol de carrara. Su costo fue de $ 25.000.

El 1 de diciembre de 1923, con la asistencia de un público numeroso, la Vise-Presidenta de la Comisión, Doña Fidela del Sel de Terán en un sencillo pero emotivo discurso, hace entrega de la placa fundida en bronce, que será colocada en el nuevo Altar Mayor. El 4 de enero de 1925, en una solemne ceremonia, el Ilmo. Mons. Andrés A. Olaizola, Vicario General del Obispado de Santa Fe, bendijo el nuevo Altar Mayor que se obsequió al Pbro. Natalio Bértolo, quien ofició el Santo Sacrificio.

Otras obras artísticas que posee la parroquia, son el Comulgatorio y las Pilas de agua Bendita, donación ambos de la familia del Sel. Las Pilas son obra del artista Giróla, quien puso en ellas todo el exquisito arte y delicadeza con que sabe tratar siempre los motivos religiosos.